Cap.5 - El Verdadero Hogar

El sol a salido anunciando un nuevo día en Arkadia, todo parecía tranquilo… demasiado tranquilo para ser arkadia, el profesor Marina  miraba desde el segundo piso hacia donde el bosque que rodea parte de arkadia. Con la mirada fija al horizonte sin realizar movimiento alguno pensaba <<que tanto es lo que no entendemos aun de nuestro mundo>> intentando asimilar la idea de que exista un ser que pueda manipular el agua del ambiente, sin comprender aun como era que lo hacia, <<estoy seguro que lo que menciono Almagor de la directora y ese chico… Damon va relacionado con lo que encontré hace años en el estanque del bosque>> recordando aquel lugar la roca tallada con signos incomprensibles para el en aquel entonces.

Almagor que venía caminando con ese típico libro en la mano, inmerso en su lectura, miro a Marina y cerró su libro – nunca imagine verte despierto a esta hora Marina – dijo amigablemente el zombie

Marina: -volteo a verle- Almagor… tu eres de los que no duerme… sabes por eso te saldrán más arrugas que a mi… -dijo para molestarle, mientras le miraba seriamente-

Almagor: -se quedó mudo por un segundo- a…arrugas? –le vino a la mente la imagen de el mismo con la carne toda colgada – no se por qué debería preocuparme eso…

Marina: sabes muy bien que tu apariencia te preocupa mas que a cualquiera de los demás… solo finges que no te importa…

Almagor: calumnias –dijo mientras ponía aquella postura de muchachito engreído, alzando el mentón, mientras se cruza de brazos con los ojos cerrados  – solo son calumnias suyas hacia mi persona  – como queriendo ocultar que estaba ofendido, sin embargo, aquello era tan notorio que cualquiera, incluso el mas distraído notaria-

Marina:  lo vez ya estas molesto… solo porque este viejo sapo te ha dicho la verdad…

Almagor:  -como queriendo no creérselo ni el mismo, aunque ya era notoria su molestia, su cuerpo estaba tenso- no diga tonterías profesor marina, ya se lo dije, tengo cosas mas importantes que pensar que en la belleza física

Marina: -chasqueo sus dedos y lo señalo, con una sonrisa dibujada en su rostro- vez como no erre en mi suposición

Almagor:  -dijo varias cosas inentendibles debido a su molestia- usted siempre atenta contra la sapiencia de cualquiera, no era de esperarse que buscara como molestarme…

Marina: sin embargo…  Almagor tu eres aquí uno de los únicos que parece estar cómodo con los misterios de arkadia

Almagor: -le miro curioso, intentando comprender porque lo decía- eso… sabe que eso no es verdad… desde que llegue aquí eh tenido el presentimiento de que hay algo detrás de todo…

Marina: -lo miro unos segundos con cara de sarcasmo ante sus palabras- también fuiste tú quien empezó a meternos un montón de ideas…

Almagor:  -una enorme gota de vergüenza se posó en su nuca- eso… bueno es que estoy seguro que lo sé, aparte, ustedes mismos lo han notado –

Marina: a eso me refiero… según los registros de los profesores anteriores y los múltiples reportes no había existido ningún incidente antes, solo incidentes menores con los alumnos o cosas sencillas. Pero de la nada ahora están brincando cosas inexplicables

Almagor: lo se… también trato de asimilar lo que está ocurriendo…

Marina: recuerdo que… cuando llegaste lo primero que dijiste fue “siento que este es mi hogar”

Almagor: -miro al sapo sin poder esconder su impacto- no puedo creer que eso lo recuerde a un profesor marina

Marina: son cosas que no se olvidan sobre todo por la manera en la que llegaste –dijo el viejo sapo sacando una pipa de sus bolsillos- nadie hubiese imaginado que andarías vagando sin rumbo por las zonas aledañas de arkadia, era como si supieses a donde ir.

Almagor:  yo… realmente no sé porque me perdí, creía que arkadia era una ilusión la mayoría de la gente en ese momento no tenía idea de donde realmente estaba el lugar, aparte venia de tierras lejanas era normal que me perdiera en el camino… aparte realmente siento que este es mi hogar, el lugar a donde pertenezco y que todos aquí son mi familia

Marina: en ese caso… quiero ser tu tío molesto…

Almagor: ah? –sorprendido no puedo evitar reír ante lo que marina había dicho-

Marina simplemente le miro de reojo, sonriendo por verle reír; de verdad habían sido muy pocas las veces que Almagor se comportaba como un chico y no como una máquina de trabajo.  A pesar que llevaran años conociéndose Marina aun sentía la responsabilidad de cuidar de Almagor casi tanto como la sensación que un padre de cuidar a su hijo,  por aquella pequeña razón buscaba poder verle disfrutar la vida, por otra parte Eliot quien estaba despertando caminaba cual zombie por el jardín de la planta baja sin escapársele a Marina su presencia, caminaba rumbo a arquetias quien desde mas temprano había despertado para correr un poco. La directora quien miraba la escena de igual forma recargada en una de las columnas, sonreía ante ese otro día cualquiera que comenzaba muy similar a los de siempre con la diferencia quizá de que Almagor reía en la planta superior y arquetias volvía a poner a Eliot a hacer ejercicio.

Bernard por otra parte había desesperado para ver desde la torre mas alta hacia el viejo campanario a la lejanía, mientras la brisa del aire jugaba con su cabello y su bufanda blanca. Ya hacia tiempo desde que había llegado que eso hacia la mayor parte del tiempo, mirar desde el techo del viejo edificio al horizonte como esperando algo;  quizá hasta parecía que no era el mismo en esos momentos. Celene despertaba al recibir un poco de luz entrando por la ventana, como cada mañana desde hace un par de días sonreía al pensar en ver a Bernard , quizá esa era la verdadera razón para que esta despertase tan temprano a alistarse, Tähti la dragona amiga de Celene por otra parte al recibir la luz simplemente se escondía bajo las cobijas.

Celene: -una vez lista y arreglada salió de la habitación para tocar a la de Tähti- vamos!! Ya es hora ¿aún no estas lista Tähti?

Tähti: -parándose inevitablemente para que Celene no tumbase la puerta- no… aun no… es muy temprano como para que vengas a tirarnos la puerta, sabes que tengo compañera de habitación Celene…

Celene: lo sé pero es mejor así nadie llega tarde…

Tähti: como si no supiera que lo haces por ese chico…

Celene: por Berny? –se sonroja apenada- aaahy como crees

Tähti: -mirándola sin creérselo- por favor desde que despertaste solo hablas de el

Celene: no es verdad… pero mi culpa no es que sea guapo…

Tähti: lo ves? Tienes un problema… y tiene Nombre

Celene: lo… lamento, es solo que… el me gusta bastante, quiero… quiero poder estar con el todo el tiempo, es tan lindo y tan bobito…

Tähti: solo es un chico… aunque si ha cambiado mucho desde el día que llego, después de… que casi te pierdo Celene el estuvo involucrado también…

Celene: no lo recuerdo… lo ultimo que logro recordar de ese día, pero imagino que nos besamos apasionada y románticamente.

Tähti: me arreglare en lo que sueñas despierta con el esta bien?

Celene: de acuerdo… -mientras caminaba hacia el barandal del pasillo, al estar mirando a varias parte de la nada lo vio allí, el color naranja de su cabello resaltaba en el cielo azul- que estará haciendo allí? –se quedó mirándole tiernamente, mientras este parecía ni siquiera notar que le veían desde abajo- me pregunto… ¿Qué estará pensando?

De la nada una imagen le vino a Bernard a la mente en ese mismo lugar, un día de lluvia desde abajo en el jardín vio a su padre siendo seguido por unas cosas extrañas que gamas había visto antes, de la nada la imagen se esfumo regresándolo a la realidad, todo estaba normal eh inclusive todo era tranquilo, pero su corazón estaba muy agitado –padre – fue todo lo que pudo mencionar.

 

En el infierno las cosas comenzaron a tornarse pesadas, un grupo de criaturas se había rebelado contra el régimen, hades el general del infierno había puesto a su gente en acción para apaciguar a los rebeldes. Damien por otra parte buscaba todas las maneras posibles para poder mantener el orden en el infierno así que no podía desatender ningún asunto en el, Hades había llegado a su oficina bastante serio pidiendo hablar a solas con el, a lo que este le concedió su petición.

Hades: Damien las cosas se están saliendo de control…

Damien: como desde hace años, se que puedes encargarte de eso…

Hades: tu sabes tan bien como yo quienes causan esto, cuanto mas vamos a esperar a que esto no se nos salga de las manos

Damien: no podemos matarlos… sabes bien que si lo hacemos entonces Lucius perderá toda credibilidad, si de actuar solo por nosotros hacia años lo hubiésemos hecho… sin embargo…

Hades: dudo que padre allá tenido la más mínima idea de cómo llevar este lugar…

Damien: no te atrevas a volverlo a decir… el sabia como dirigir este sitio y si eligió a Lucius para continuar es porque ninguno fue digno para llevar este reino…

Hades:  realmente se que no fue nuestro padre quien lo eligió… se que fuiste tu quien decidió que Lucius fuese el gobernante de las sombras

Damien: estuviste de acuerdo conmigo… recuerdas?

Hades: solo fue temporal, en lo que Bernard crecía… pero prácticamente tu eres quien lleva el poder, no Lucius…

Damien:  estas desconfiando de mí? Hermano?

Hades: jamás lo haría… sin embargo ya han muerto 2 de nuestros hermanos por defender un tonto ideal… no quiero que mi hija page las consecuencias de que Abel no esté aquí

Damien:  Abel… nunca imagine escucharte volver a llamarle de esa forma…

Hades:  me preocupa la seguridad de todos aquí, es simplemente que no confió en que Lucius deje que Bernard tome su lugar aquí… Ya se a escapado de la vigilancia un par de ocasiones

Damien: Hades… no olvides que tenemos que cumplir con las ordenes que Abel nos dio, en algún momento quizá Lucius le despierte tal y como menciono Azrael aquel día. Cuando eso ocurra estoy seguro que Bernard volverá aquí… <<sin embargo,  aun ahora es mejor mantener a bernard alejado de este sitio por el bien de todos y del equilibrio>>

Hades:  entiendo…  pero que pasara si Bernard no está lo suficiente preparado…

Damien: entonces… como menciono Abel aquel día, una enorme lucha será desatada en el mundo, toda la ira y el odio que corrompieron a Padre serán desatadas y absorbidas por su nuevo huésped. Y la muerte para todos será inevitable, el dolor, la venganza, destruirá todo a su paso… ni siquiera los seres de luz podrán detenerle, Abel lo sabía por eso decidió que Bernard creciera en su mundo, aun sabiendo que los demonios de su propio pasado les perseguirían. Aunque realmente aun no entiendo tampoco que es lo que planeaba ya que…

Hades:  -interrumpiéndole- Lucius, apago al último ser más sabio del mundo… lo recuerdo perfectamente…

Damien: tampoco olvidemos que Abel no hubiese ayudado en nada de no haber sido por Bernard, hay que esperar y resistir lo mas que podamos.  <<Si los sentimientos y los deseos de las piezas del destino se mueven en la posición correcta quizá nuestro futuro cambie para siempre…>>

 

En la mansión Damon, Lucius se a despertado como cada día a abrir la cortina diciendo –buenos días señor sol! Un nuevo día a comenzado!!!  ……  no entiendo porque me alegra tanto ver entrar la luz del sol en esta vieja habitación… Bernard… - después de eso se perdió unos minutos mirando hacia afuera del ventanal sujetando las cortinas – ojala… aun estén nuestras rosas en aquel lugar Aylin – dijo susurrando.

- Lucius… - dijo una voz detrás de el

Lucius: -giro para ver de quien se trataba y una sonrisa apareció en su rostro- no creí verte aquí de nuevo Angel de la muerte…

Azrael: solo cumplo con mi trabajo, sin embargo…  Escuche el llamado de Abel, aunque tu ni siquiera puedes preocuparte por eso o no Lucius?

Lucius:  Abel… -dijo entre dientes repitiéndolo un par de veces más- recuerdo ese nombre… pero de quien era ese nombre, porque no veo más que niebla cuando intento recordar… -se tocó la frente con la mano- ojala pudiese…

Azrael: Lucius… <<tu vida es aun inmortal no por tu deseo, sin embargo, tu memoria es peligrosa para el futuro, así que tú mismo la ocultaste hasta de ti>> con el tiempo regresara despejando toda duda… -Lucius se sentó en un viejo sofá, Azrael le toco el hombro, el tiempo se detuvo por completo en ese momento. El demonio se quedó mirando a la nada como si algo dentro de el despertara- Abel…

Lucius: … -volvio en si pero con una mirada diferente- Aun… aun me llamas de esa manera tan insultante… ya ni siquiera soy humano totalmente, pero tampoco puedo soportar la idea de volver a perder este mundo… ya soy demasiado viejo…

Azrael: ya te compadeces de tu propia alma y ni siquiera estas muerto…

Lucius: ya no hace falta que yo muera para que lo haga, después de todo… si aun estoy en este lugar es porque aun no eh terminado. Soy quien lleva el pecado de su pasado y la carga de su futuro

Azrael: nadie en este mundo sabe, ni conoce mejor el verdadero poder que llevas en ti… -le soltó, el tiempo regreso de nuevo a andar- no crees que ya es hora de que vuelvas también a casa?

Lucius: -confundido regreso en si- ¿volver a casa? Si un ángel me lo dice entonces quizá es porque mi hogar no está aquí… ESTA DECIDIDO! –Se paró de golpe del sofá y corrió al ventanal para abrirlo y señalar al horizonte- Buscare mi hogar… Este hermoso mundo debe guardar un lugar para mí! –coloco sus manos al lado de su boca para gritar- ME ESCUCHASTE ELOISE!! VOY A REGRESAR A CASA!!!

Azrael que lo miraba un poco entretenido con la respuesta de niño pequeño ante la aventura de pronto quedo anonadado por escucharlo hablarle a Eloise hacía muchos años que no escuchaba aquel nombre salir de sus labios, ya hacia tanto que prácticamente el mismo le había olvidado. Pero era natural aquel nombre significaba tantas cosas para el demonio quizá estaba llevado por su esperanza por un deseo oculto muy dentro de su corazón; una marca imborrable de su esencia que le guiaba a cada paso en la sendera del destino que el mismo decidió tomar. Como magia aunada al momento la luz del cielo le iluminaba de tal manera que pareciera que dios mismo respondía, Lucius no tardó mucho en dar un brinco por la ventana para volar alegre cerca de la mansión para luego sentarse sobre el tejado – regresare por fin a casa Eli – se dijo el mismo entre dientes, el ángel había desaparecido casi como había llegado. En todo el mundo se sentía la tensión de una enorme ola de cambio que se avecinaba, Damien sentía aquella impaciencia hacia el reloj, el tiempo que no se detenía, justo había vuelto a casa a buscar a Lucius sin embargo los busco como loco entre los cuartos sin dar con el.

Damien quien llego a la mansión buscando a Lucius abrió la puerta de la habitación donde siempre estaba sin embargo el demonio no se encontraba, un poco preocupado por las constantes escapadas de su hermano comenzó a buscarle en todas las habitaciones

 - Lucius… donde te metiste… dios ese hombre es peor que niño pequeño – dijo Damien pero Lucius por otro lado le había visto venir por lo que se ocultaba en cada habitación a la que entraba seguido por Damien

- casi aseguraba que aquí se encontraba… -

Mientras una risilla se formaba en Lucius de la travesura que realizaba al ocultarse de Damien de una manera esplendida, al grado que cuando Damien volvió al pasillo donde Lucius se encontraba escabulléndose, casi tomándole por sorpresa este se oculto en el techo sujeto cual lagarto mirando a Damien abrir otra habitación mas, Lucius en definitiva parecía un crio de 4 años o quizá de 5 años que se oculta de quien lo busca solo por molestar. Damien cerro los ojos, suspiro al no verlo cuando de pronto sintió una mosca molesta cerca de su rostro, sin saber que en realidad se trataba de una pluma que sujetaba la cola de Lucius, así que creyendo que era un insecto comenzó a golpear el aire con la mano sin sentir nada solo el aire, ya molesto por el animal dio media vuelta chocando justo con la trenza de este volteando arriba, Lucius solo pudo reír de vergüenza por sacar de quicio a Damien.

- ya mejor no me digas nada… - dijo con una molestia evidente Damien

- vamos… solo jugaba –

-jugabas… - dijo Damien tirándole del cabello sin contar que Lucius se soltaría, cayendo sobre este –Maldición LUCIUS! – se quejó Damien

-aaaa pero tu fuiste quien me tiro…. – dijo Lucius algo lloroso – no se vale Damien tu eres un amargado no tenias poque tirar de mi cabello… no es mi culpa que te falte a ti – añadió

- A mi no me falta nada Lucius… - aumentando el tono de molestia añadió gritándole – YA BAJATE DE MI!! –

- No! Hasta que te disculpes – dijo sentándose de brazos cruzados sobre la espalda de Damien

- No estoy de humor como para soportar a un niñito como tu – al escuchar esas palabras algo despertó en Lucius, una reacción que ni siquiera Damien había visto antes. Lucius de pronto se había puesto de pie mirando hacia la pared, evocando el nombre de “Bernard” casi cual susurro, de la nada Lucius salió corriendo hacia una de las ventanas, lanzándose por ella llamando a Aylin.  Damien un poco asustado por la actitud extraña de su hermano corrió tras el sin embargo el no poseía alas para seguirle, alerto lo mas pronto que pudo a los guardias para seguir a Lucius antes de que este se perdiera nuevamente.

- arkadia… debo estar donde arkadia… - dijo Lucius mientras surcaba el cielo –se que todos me esperan en casa, se que debo volver contigo Aylin, quiero… poder volver a mi hogar, al lado de todos – se dijo a si mismo, dejando al aire jugarle con el cabello, sintiendo el aire que corría a su alrededor, esa reconfortante sensación de ser libre para soñar y creer en los sueños.

En arkadia, Celene estaba un poco inquieta por Bernard, tanto que no podía quitarle la mirada. Aquello aunado a las visiones de su sueño la mantenían vigilándole un poco, no comprendía que papel jugaba verdad en todo aquello, de pronto miro unas rosas que había plantado junto a Bernard –el todavía no podía hablar fluidamente- se dijo recordando aquel día.

-Celene… - dijo Bernard tímidamente aquella ocasión

- viniste porque me escuchaste llorar… ¿verdad? – a lo que Bernard afirmo con la cabeza –que tonta soy – se dijo tallándose los ojos

-noo… digas… eso…-

-ni siquiera sabes que pena es la que me aflige y estas aquí a mi lado –

- no hay…  peor pena… que la que uno… no se permite… olvidar… -

-Bernard… realmente te lo agradezco pero… - dijo Celene sollozando un poco mas, cuando sintió la mano del demonio tomar la suya

-yo… yo curare… tus heridas – dijo bernard sonriendo, como si no entendiera lo que pasaba dentro de ella

-Eres una persona muy linda – le sonrió un poco para luego ver de nuevo al suelo tristemente – no vale la pena que te haga llevar esta carga – dijo Celene soltando a bernard para abrazar sus piernas, cuando de la nada el joven demonio le abrazo, haciéndola sonrojarse

- quizá… pero el peso… es demasiado para… dejarte sola… aparte… no me gusta verte llorar… pones triste… a todas las flores… los muertos deben descansar… -

Aquello callo como balde de agua fría sobre Celene, era como si bernard lo supiera y de alguna forma lo comprendiera, al grado que ella lo miro con esos ojos azules intentando entender el misterio que el chico encerraba. Pero solo pudo ver una mirada sincera careciente de maldad alguna, al contrario ella misma era capaz de ver dentro de aquellos ojos verdes la esperanza que había perdido, juntos entonces habían ido a enterrar el viejo arete de mariposa que Celene llevaba consigo como recordatorio de su pecado mucho antes de llegar a Arkadea; Aquel día ella había enterrado no solo una culpa, si no mas bien había sido liberada de una enorme carga gracias a ese chico. Sin embargo en la actualidad sentía una ligera presión en el pecho al pensar en bernard, era como si, en aquel corazón aquel hombre lo hubiese robado desde aquel día, o quizá, desde el primer encuentro de ambos. Toda la esperanza de un futuro, todos aquellos sueños muertos en Celene habían vuelto haciéndose mas fuertes con solo ver o estar cerca de Bernard.

- ¿Celene? – dijo Tähti algo preocupada por el distanciamiento de su amiga

-ah? – Dijo Celene volteando a verle, sin poder ocultar su evidente preocupación actual

Tähti: se trata de Bernard no es así?

Celene: -afirmo con la cabeza- tengo… miedo de que… algo malo le pase, puedo sentir que necesito, protegerlo… pero no sé de que

Tähti: protegerlo… -miro a Bernard que parecía estar ocupado en sus asuntos sin prestar atención a las chicas pero de la nada este se puso repentinamente de pie

Bernard: está acercándose –dijo mirando el cielo, luego miro inevitablemente a Celene sonriéndole-  

Celene le regreso el gesto a bernard, Tähti no podía creer lo que había dicho bernard, no podía entender a que se refería sin embargo, aquel chico era la cosa más rara en arkadia. Salía de todo contexto para todos inclusive profesores era un misterio andante, junto a su raro color de cabello ayudado por su altura. Se acercó a donde las chicas diciéndoles una vez estaba cerca – no tardará mucho en que el cielo limpie la tierra, para alimentar a la vida que debe mantener – después de decir se perdió en los ojos de Celene aunque era algo natural en ambos que eso pasara, todo el tiempo buscándose con la mirada. En definitiva Tähti podía intuir que aquello era mucho más que atracción, realmente estaban destinados de alguna forma a conocerse, sus almas buscaban estar juntas; por lo que la dragona se incomodaba un poco y decidía alejarse para dejarles solos. No tardo mucho después de que ella hubiese huido para que las gotitas de la lluvia comenzaran a caer

Celene: vaya, ya comenzó a chispear –dijo poniéndose de pie ayudada por bernard, solo el tocar su mano le había hecho olvidar aquel raro sentir

Berna: Celene… te sonrojaste?

Celene: aaaaa no no no –decía mientras trataba de evitar la mirada de Bernard- es solo que tenía un largo rato bajo el sol

Berna: Ya veo… -la lluvia recio justo en ese momento- nos resfriaremos si seguimos aquí –la tomo de la muñeca y se la llevo bajo un pequeño pórtico de uno de los edificios- no creía que la lluvia cambiara así de pronto… todo huele a humedad

Celene: la lluvia… es un poco triste ¿No lo crees? solo porque lo moja todo…

Berna: yo… más bien creo… que es un poco melancólico pero el principio de un nuevo ciclo… cuando llueve limpia todo lo malo y lo regresa a la tierra para que esta lo devuelva más puro que antes…